Crimen de la adolescente en Bariloche: «No quiero que la muerte de mi hija quede impune»
Por Lorena Roncarolo
Pedirán justicia por Lucía, la joven que fue asesinada en Bariloche, el lunes en el Centro Cívico.
«Me enoja mucho pensar que la muerte de mi hija puede quedar impune. Voy a salir a dar pelea». Mariela, la mamá de Lucía, la adolescente que murió asesinada el fin de semana pasado en Bariloche, se muestra firme, aunque por momentos, no logra ocultar su desconsuelo.
El asesinato de la joven de 14 años se produjo el sábado por la madrugada a la salida de un bar clandestino en el barrio Nahuel Hue. Las dos adolescentes habrían discutido y el dueño del local les pidió que se retiraran. La discusión continuó en la calle y una de ellas sacó un cuchillo e hirió a la otra muchacha. Sus amigos intentaron trasladarla al hospital Ramón Carrillo pero murió en el camino.
«No me enteré hasta las 9 de la mañana porque estaba trabajando. Solo me dijeron que había tenido un accidente y todo el camino de mi trabajo hasta el hospital fue un caos. Al llegar, cuando vi las caras, supe que estaba todo mal. Fue horrible. Nunca me imaginé que me la iban a entregar en un cajón», detalló la mujer con la voz quebrada por el dolor.
Mariela consideró como «inentendible» que un bar reciba a menores de edad y más aún que venda alcohol. «Me han dicho que siempre hacían fiestas clandestinas. Estuvo clausurado, pero pagaron una multa de mucha plata y lo volvieron a habilitar. En un principio, hablaron de matiné: es ilógico que los chicos puedan estar a las cinco de la mañana y que les vendan alcohol. Voy a ir contra todos para que cada uno asuma la parte que le toca», recalcó.
Aclaró también que su familia no vive cerca del barrio Nahuel Hue. «Mi hija estaba en casa de los abuelos. A veces, se iba a dormir allá. Jamás salía sin permiso, pero tuvo que pasar esto. Son cosas de adolescentes. Cosas que hicimos todos, como escaparnos por la ventana», indicó.
Reconoció que hoy, la situación es «extremadamente difícil para todos». «Es una lucha que recién empieza y que no voy abandonar. Soy una mamá rota pero soy guerrera. Alguien debe pagar y hacerse cargo», menciona.
Días atrás, el Ministerio Público Fiscal informó que no imputará a la chica sospechada de haber causado la muerte de Lucía porque también tiene 14 años y es inimputable, según el régimen penal de minoridad.
«No la conozco -admite Mariela- y nadie de su entorno se acercó a mí. No creo que fueran amigas. Los amigos de mi hija no serían capaz de dañar a nadie. No puedo entender qué le pasó por la cabeza a la piba. Hay que estar demasiado enfermo para quitarle la vida a otra persona».
El lunes próximo por la tarde, los familiares y amigos de Lucía se concentrarán en el Centro Cívico con velas y globos blancos. «Hay mucha gente que me acompaña, que me brinda su apoyo y amor para pedir justicia por Lucía y que ningún otro niño salga lastimado. Es muy duro. Cada día, mi primer pensamiento es para mi hija y al acostarme, lo mismo. Nos dejó un vacío enorme», dijo. (Río Negro)