12 septiembre, 2024

Bariloche: Plantaron 1500 árboles en una ladera del Cerro Otto

Cuarenta voluntarios se unieron para reforestar una zona boscosa degradada por incendios sobre la ladera sur del Cerro Otto, en Bariloche. En total, se plantaron 1500 lengas, una especie nativa del lugar y representativa del bosque Andino Patagónico del sur de la Argentina y de Chile.

La reforestación se llevó a cabo a lo largo de una jornada completa y cumplió con estrictos protocolos sanitarios para evitar la propagación del Covid-19. Los grupos se organizaron en burbujas de entre cinco y seis personas, guiados por un coordinador.

El Cerro Otto, el área escogida para llevar adelante la reforestación, sufrió un voraz incendio en 1995, que degradó el ecosistema boscoso del lugar. “La plantación la hicimos con el objetivo de restaurar ecológicamente un bosque de lengas que no mostraba signos de recuperación porque es una especie que no rebrota post fuego”, explicó Agustina Iglesias Louis, miembro de la ONG Circuito Verde. A su vez, señaló la fragilidad geológica del lugar y el aporte de los árboles como mitigadores de inundaciones en la base del cerro y retenedores de tierra con sus raíces para evitar desmoronamientos.

La actividad fue convocada en conjunto por el INTA y por Circuito Verde, una ONG conformada por jóvenes profesionales que realiza acciones enfocadas en la mejora de la situación ambiental de Bariloche. Los participantes se inscribieron a través de un formulario, donde se les explicó las medidas sanitarias requeridas y los recaudos necesarios a la hora de plantar.

“Es importante plantar por el hecho de que generamos un cambio tanto a nivel ecosistémico como a nivel sociedad. Plantamos porque creemos que podemos ver un cambio a nivel ambiental y a nivel social, y porque creemos que ese cambio es posible. La plantación, más allá de unir a gente que quería saldar la huella de carbono, producir oxígeno por árboles, remediar un ecosistema, también juntó gente con un mismo denominador común: querer ver y hacer un mundo mejor”, destacó Iglesias Louis.

Los bosques brindan importantes servicios ecosistémicos: ayudan en el proceso de regulación hídrica del suelo, cumplen un rol central en la conservación de la biodiversidad, contribuyen a la conservación del suelo y de calidad del agua y forman parte del proceso de fijación de carbono. Solo en los últimos 10 años, la Argentina perdió 2,7 millones de hectáreas de bosque nativo a causa de los incendios forestales, la expansión de la frontera agrícola, el sobrepastoreo y la sobreexplotación de sus recursos.

Plantando Patagonia

En su visita a Bariloche a fines de 2019, Karin ―una turista israelí— se contactó con la ONG Circuito Verde para donar 60 plantines de árboles nativos y así saldar la huella de carbono que dejaba a su paso durante su viaje por la Patagonia. La inquietud de esta turista motivó la creación de un programa dentro de la ONG para fomentar que el turismo sea en equilibrio y conexión con la naturaleza.

Se estima que más de 700.000 personas al año eligen Bariloche como destino turístico. El objetivo de PlantAndo Patagonia es que todos aquellos que visiten la ciudad sean conscientes del impacto ambiental que genera el turismo y que tengan una opción concreta para mitigarlo a partir de la compensación de su huella de carbono y la plantación de árboles nativos en el lugar.

*Aquellos lectores interesados en donar árboles para compensar su huella de carbono o que quieran sumarse como voluntarios para las futuras reforestaciones podrán hacerlo a través de: https://www.circuitoverde.org/plantandopatagonia

**Informe por Maite Santana Karlen

(La Nación)